NOCHEVIEJA (Parte 1)—Una encantadora sujeto, inspirada en nuestras sesiones decidió

NOCHEVIEJA (Parte 1)—Una encantadora sujeto, inspirada en nuestras sesiones decidió escribir esto…—Otra vez 31… volví a mi casa después de cenar con la familia con muy pocas ganas de salir. Tener que arreglarme, pasar frío, transporte público… Qué bien haría quedándome en casa pensé.Sin embargo apenas nos juntamos todas las amigas media docena de veces al año y esta era una de ellas. Habíamos reservado una habitación en uno de los mejores hoteles de Madrid solo para poder entrar a la fiesta que organizaban. Todas decían que iba a estar muy bien así que no podía fallar, aunque quisiese.Entré en mi habitación y cogí la ropa que había dejado preparada. Este año no iba a sufrir, ni frió, ni incomodidad. Un buen jersey y nada de tacones. Nunca me ha gustado vestirme de gala y este año no iba a caer en la trampa de hacerlo.Encendí el ordenador para poner música y vi un e-mail que parecía de mi trabajo. No me dejan descansar ni en vacaciones fue lo primero que pasó por mi cabeza. Abrí el fichero adjunto y la pantalla se fue a negro.- Menuda manera de empezar el año, me han colado un virusPero el ordenador no se había apagado. Un ruido metálico, apenas perceptible salía por los altavoces. Subí el volumen para confirmar que el ruido era real y me senté frente al teclado pulsando las teclas intentando hacerlo funcionar. Ya desesperada pulse el botón de apagado pero tampoco.Cuando ya me disponía a bajar el volumen y arreglarme algo comenzó a aparecer en la pantalla. Desde el centro un punto rosa iba girando conformando una espiral. Era algo lento pero poco a poco la pantalla se iba llenando con esa imagen. ¿Qué sucedería cuando se llenase del todo?. ¿Recuperaría el control del ordenador? Merecía la pena esperar.Me acomodé en la silla esperando alguna reacción. Cuando por fin la espiral se completó, lejos de arreglarse, empezaron a aparecer unos destellos. Parecía que entre ellos había alguna palabra.Me incline hacia delante quedando a dos palmos de la pantalla intentando leerlas. Al principio era casi imposible pero parecía que cada vez parpadeaban más despacio. De nuevo no tenía más que esperar a que se quedasen el suficiente tiempo como para poder entenderlas.RELAJADAFue la primera palabra que pude leer. ¿Qué es esto? PenséTRANQUILAMe intrigaba mucho aquello. ¿Qué era lo que estaba sucediendo en mi ordenador?ATENTAClaro que estoy atenta, ¿Cómo no voy a estarlo? Si quiero recuperar mi ordenador tengo que estarlo.CANSADALa verdad es que me sentía cansada. Ya venía cansada. Por eso no tenía ganas de salir. Además ese ruido de fondo y el movimiento de la espiral me estaban haciendo quedarme dormida. Tenía que moverme si no quería llegar tarde pero decidí observar un rato mas lo que sucedía.Aquellas cuatro palabras aparecían una y otra vez mientras la espiral cogía velocidad. De nuevo volvieron a aparecer los destellos más rápido. Si quería seguir leyendo sin perderme nada tenía que intentar no parpadear y así lo hice.De repente sentí mucho sueño, muchísimo, un sueño inaguantable. Justo antes de quedar dormida las palabras habían cambiado y se clavaban en mis ojos rápidamente.SEXY, DIVERTIDA, SENSUAL, ATREVIDA, EXCITADA, SEXY, DIVERTIDA, SENSUAL, ATREVIDA, EXCITADA, SEXY, DIVERTIDA, SENSUAL, ATREVIDA, EXCITADA SEXY, DIVERTIDA, SENSUAL, ATREVIDA, EXCITADA…Cuando desperté lo primero que hice fue mirar el reloj. ¡Me había quedado casi una hora dormida frente al ordenador!No recordaba nada de lo sucedido más allá de la ida a negro de la pantalla. Al menos ahora aparecía todo en blanco con el cursor permitiendo escribir. Probé a escribir lo primero que se me ocurrió: HOTEL EUROSTAR TOWERNada mas pulsar el intro volví a tener mi ordenador disponible. ¡Menos mal! Una sensación de alegría total me invadió. Iba a llegar tarde pero aquella siesta me había devuelto por completo las ganas de salir. Puse la música más animada que encontré a todo volumen y corrí a la ducha.No tenía pensado ducharme pero me iba a venir bien para despejarme después de haber dormido. Me desnudé tirando la ropa por el pasillo al tiempo que avisaba a mis amigas de que llegaría tarde. Rápidamente me sequé y con el albornoz puesto me ondulé un poco el pelo y me empecé a maquillar.No es algo que suela hacer así que tuve que rebuscar entre el armario del baño todo el set. Base, colorete, rimmel, eyelinner, alargador de pestañas, pintalabios… Poco a poco fui consiguiendo el resultado que quería. Estaba quedando espectacular.- ¿Por qué no haré esto más a menudo? – Dije en voz alta riendo al verme tan guapa.Corrí a la habitación y busqué la ropa que había dejado preparada. ¿Cómo podía haber elegido algo tan aburrido?. Abrí el armario y tras mirar entre mi ropa más habitual no encontré nada que me gustase. Tuve que rebuscar mucho para encontrar unos pantalones negros acampanados con tiro alto que me habían regalado hace años y que nunca había llegado a estrenar porque me parecían demasiado ceñidos.No sabía muy bien con que podía conjuntar eso pero recordé un top también negro que me habían regalado en primavera. Me costó bastante encontrarlo y cuando me lo puse me percaté de que era muy de verano. Ombligo al aire. Gran escote. Joder me iba a morir de frio.Me miré al espejo y me sentí más sexy que nunca. Una noche es una noche. Total dentro del hotel no hará frío. Merecerá la pena sufrir un poco en el trayecto con tal de deslumbrar en la fiesta.Sin dejar de mirarme en el espejo me puse pendientes, collar, pulseras. Apenas me reconocía pero no podía evitar sonreírme a mi misma al verme así.Como si de un flash se tratase vinieron a mi mente unos taconazos que guarde en el trastero hace años. Cogí las llaves y llamé al ascensor. Un par de adolescentes subían y tuve que compartirlo con ellos. Los pobres no dejaban de mirarme aprovechando los reflejos de los espejos, intentaban disimular pero me di cuenta. No puedo negar que incluso me excité un poco al despertar esas miradas furtivas.Tras encontrar los zapatos bajé de nuevo a casa y me los puse. Eran altísimos pero me quedaban increíbles. El ruido de la música se mezclaba con mi taconeo al caminar buscando un bolso que conjuntase. No tardé en encontrarlo. También negro.Fui al baño a perfumarme y tras hacerlo me fije en un pintalabios que antes había descartado por parecerme demasiado llamativo. Ya daba igual. Me iban a mirar todos de todas formas así que lo cogí y me pinte los labios de rojo intenso. El color resaltaba aun más con lo negro del resto del vestuario. Estaba arrebatadora.Llame a un taxi y bajé al portal con una sonrisa de oreja a oreja. No podía dejar de mirarme en los espejos. Que preciosa me veía.- ¡Qué bien me había sentado la siesta! – PenséAhora solo tenía ganas de llegar al hotel y disfrutar como hacía años que no hacía. Mientras miraba el móvil confirmando que ya me estaban esperando mis amigas llego el taxi. Eran ya casi las 3 de la madrugada pero la noche acababa de empezar. -- source link

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