En muchas ocasiones Me han dicho que hago hincapié en el cuidado que debe tener el sumiso, en
En muchas ocasiones Me han dicho que hago hincapié en el cuidado que debe tener el sumiso, en el mundo BDSM, ante las Dominantes, debido a que muchas de ellas no ven al ser humano que vibra bajo el Rol y la piel, sino un objeto para usar y tirar sin más. Es por ese motivo que sostengo que el Respeto en este mundo, a veces, es una línea muy delgada y está llena de matices que no siempre son claros y objetivos. Esa es la razón de por qué soy tan clara en Mi visión y soy de cuidar lo que no se ve, de evitar esas señales hirientes que tardan muchísimo en cicatrizar: Las marcas de la mente y las del alma. En este mundo, hay Dominas que no toleran ser cuestionadas, no admiten réplicas y someten a los sumisos a un estres mental que los coacciona y confunde, incitándolos a pensar que por obedecer y soportar todo son mejores que otros pupilos. En Mi opinión, eso nos denigra como Dominas y no fomenta el crecimiento personal del sumiso. La Dominante, que es como Me gusta decir, debe ser, ante todo, honesta consigo misma y un baluarte de valores, coherencia y actitud como persona. La Humildad para inspirar a otros a ser mejores personas es lo que Nos hace Aptas en nuestro Rol. Y cuando la Dominante llega a repudiar la actitud de un sumiso, nunca piensa que es “su culpa” cuando en realidad, en la mayoría de las ocasiones, se trata de una falta de guía clara por parte de “aquellas” que han olvidado que el sumiso es la extensión del brazo que lo controla, que ha dejado de inspirar la necesidad de Pertenencia y Entrega, con mayúscula, en Su pupilo. OPINIÓNLa Reina NegraDannae Dann -- source link
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